SUFRIR O NO SUFRIR POR AMOR ¿ESA ES LA CUESTIÓN? (PARTE II)
- Sandra Torres Sánchez
- 27 jun 2018
- 1 Min. de lectura
Tratando de responder a la demanda de una paciente en particular. Elaboré la siguiente carta que la he dirigido a ese sentimiento que en algún momento, más temprano que tarde nos abandona, se agota, o naturalmente se termina. Tengo la ilusión y deseo imaginar que podré interpretar a muchos/as.
El objetivo de ésta misiva, es despedir a un gran amor que se termina, plasmar en palabras ese hermoso sentimiento y permitir que siga siendo hermoso.
Creo firmemente que algo tan sublime como AMAR, nunca debe dejar de ser hermoso.
Para mi gran amor:
… Por un minuto, por un segundo, por un pequeño espacio en el tiempo, tú y yo nos cruzamos, nos pensamos, nos sentimos, nos amamos... ambos mirábamos la vida desde y hacia un mismo lugar.
Gracias, por aparecer en mi mundo, impregnando cada día, cada momento con tu presencia. Cuándo estabas y cuándo no estabas, era tu recuerdo el que al hacerse presente nuevamente me inundaba de ti. Gracias amor, gracias, gracias.
Hiciste dulce e infinito cada momento presente, llenaste cada uno de mis vacíos y marcaste muchas veces con fuego tu nombre en mí. Te deseo lo mejor. Porque, si soy capaz de rendirme a tu perdida todo será más fácil para mi. Dejaré de luchar y podré simplemente aceptar.
CONTINUARÁ…

Comments